Extractos Boletín Cofradía

Cuaresma 2024. Saluda del Hermano Mayor

¡Tarde te amé, hermosura tan antigua y
tan nueva, tarde te amé! Tú estabas dentro
de mí y yo fuera, y por fuera te buscaba (…).


Fragmento de las Confesiones San Agustín

Queridos hermanos y hermanas:

       Es tiempo de Cuaresma, el preludio de la Semana Santa. Para los cristianos en general y para nosotros los cofrades en particular, la Cuaresma es un momento de preparación y renovación espiritual para lo más importante que está por llegar: la gran fiesta de la Pascua. Esta nueva Cuaresma que comienza tiene que ser el periodo de reflexión que nos sirva para reencontrarnos con nuestra fe, con Dios; ese Dios que está en nuestro interior, renovando nuestro compromiso con Él, esto nos llevara a renovar ese compromiso hacia nuestros hermanos y hermanas, a vivir una nueva Semana Santa recordando su sacrificio y amor incondicional por todos nosotros, siendo transmisores de que él está en cada uno de nosotros y de la alegría de la Resurrección.

     Como hermandad, tenemos el compromiso fiel de ser evangelizadores cada Jueves Santo, siendo transmisores en la calle deComo portadores de nuestros enseres, conocedores de que sólo cobran su auténtico sentido l mensaje del evangelio; y llevando la luz de la fe y el Amor de Cristo, mediante nuestro desfilar por las calles de nuestro pueblo haciendo pública manifestación de fe.

       Como penitentes cada paso que deis debe ser un ejemplo de Amor, entrega y sacrificio; testimonio de la fe que compartimos como hermanos y recordándonos la importancia de la humildad y la reflexión en nuestro camino.

       Como Mantilla, vuestro respeto, sobriedad, y saber estar, debe ser ejemplo del Amor y entrega de la Virgen María, siendo conocedoras de que acompañáis a la Madre e intercesora de todos nosotros.

       Como portadores de nuestros enseres, conocedores de que sólo cobran su auténtico sentido estando al servicio de la evangelización.

       Como horquilleros portadores de nuestros sagrados titulares, con ese especial cariño por las calles de nuestro pueblo transmitiendo el momento en el que Jesús nos hizo a todos hermanos e hijos de una misma madre. Jesús, viendo a su madre y junto a ella al discípulo a quien amaba, dice a su madre: “Mujer, he ahí a tu hijo”. Luego dice al discípulo: “He ahí a tu madre” (Jn 19, 26-27).

       No quiero terminar sin recordar a Antonio Díaz. Aunque no fue hermano de nuestra cofradía, siempre tuvo un especial cariño por los “Hijos del trueno”, como él nos conocía. Luchó incansablemente por la Semana Santa de Nuestro Pueblo y es justo reconocerle el trabajo que realizó durante tantos años, muy especialmente en el mantenimiento y protección de la ceremonia de “EL PASO”. Gracias Antonio, los hermanos de San Juan no te olvidan.

       Sin más, me despido de vosotros pidiendo que el Stmo. Cristo de la Buena Muerte, María Stma. de la Amargura y San Juan Evangelista intercedan por nosotros y que tengamos una muy feliz estación de penitencia.

Francisco Jesús Matías Pérez

Cuaresma 2024.

Cuaresma 2024. Saluda del Párroco de Almuñécar

Queridos hermanos:

Las peculiaridades de nuestro calendario litúrgico hacen que este 2024 celebremos la Pascua del Señor en estas fechas tan tempranas del año y como si viniera “con prisa”, apenas poco después de salir de las fiestas navideñas, tenemos ya aquí la Cuaresma y Semana Santa. Como es tradición, quiero aprovechar la oportunidad que me ofrece la «Cofradía de San Juan» para compartir con todos un afectuoso saludo a través de estas líneas.

Llega una Semana Santa más “temprana” que en otros años, siguiendo una antiquísima tradición que se remonta a la historia del Antiguo Israel. La entrada de la primavera y su primera luna llena marcarán el inicio de estas fechas, que tan importantes eran para el Pueblo Judío al celebrar su fiesta de Pascua como lo son para la Iglesia que celebra el misterio central de su fe: Jesucristo Muerto y Resucitado.

Ciertamente vamos a vivir días cargados de sentido histórico, cultural y sobre todo religioso y así tenemos que entenderlos y vivirlos. Si solamente nos fijamos en lo primero puede que sepamos reconocer la gran carga sociocultural que tiene la Semana Santa, incluso que eso nos cause cierta emoción, al igual que ocurre con otras manifestaciones culturales a lo largo del año pero, desde luego, estaremos quedándonos solo con la mitad de lo que significa la Pascua Cristiana. Si todos nuestros esfuerzos y preparativos, que no son pocos durante este tiempo, van destinados solamente a la emoción o sentimentalismo que pueda ofrecer el desfile de una cofradía en la calle nos estaremos perdiendo toda esa dimensión espiritual profunda y personal, que realmente es transformadora para la persona que la vive y que es la base y sentido de toda celebración, de toda procesión y de cualquier detalle de los que, con tanto esmero, cuidamos en este tiempo para el que el día de la salida todo esté reluciente y a punto.

Somos cristianos y lo expresamos en nuestro ser cofrade, nunca podemos olvidar este orden: primero vivir de forma coherente y sincera los misterios de nuestra fe en Cristo Jesús y la devoción a María Santísima, y esa experiencia personal y comunitaria con el Señor la expresamos después en y a través de nuestra cofradía.

Las cofradías, como nos recuerdan los Obispos del Sur en su Carta Pastoral, son un medio privilegiado para la evangelización cuando cumplen bien su función. Pero las cofradías no son entes abstractos, las componemos las personas, y por tanto en la medida en que cada uno de los hermanos se tome en serio y de forma responsable su ser cofrade, en esa misma medida su cofradía brillará como lo que tiene que ser: testimonio público de fe y medio para que otros muchos puedan conocer a Jesucristo y encontrarse con Él.

Aprovechemos por tanto este tiempo, queridos hermanos, vamos a centrarnos en lo principal y no en lo secundario. Que lleguemos a la Semana Santa después de un tiempo cuaresmal de verdadero espíritu de conversión, participemos con devoción en las celebraciones del Santo Triduo Pascual

Que sea realmente el “paso” de Cristo por nuestra vida, muriendo al pecado y acogiéndonos a la novedad de su Resurrección, de esta forma el discurrir del Santísimo Cristo de la Buena Muerte, María Santísima de la Amargura y San Juan por nuestras calles, la tarde del Jueves Santo, será un bello testimonio de fe y devoción para Almuñécar y un impulso para comunicar y vivir lo que hemos celebrado durante el resto del año.

¡FELIZ PASCUA DE RESURRECCIÓN!

        Juan Antonio Arcos Segovia, Párroco de Almuñécar.

Vivir la Fe en el silencio

«El silencio es la morada de las almas grandes” decía San Enrique de Ossó.

     Y pienso en Jesús orando en el huerto de Getsemaní. Y en tantas ocasiones en las que el silencio está presente en los Evangelios en momentos tan importantes. Y no puedo dejar de pensar en el silencio de Jesús en la Pasión. Ese silencio de saberlo todo, de darlo todo por Amor. Me impresiona siempre.

     Y es que estamos tan acostumbrados al ruido en nuestras vidas, todos queremos hablar, ser los protagonistas en las conversaciones, que se nos escuche, y a veces de tanto hablar ni sabemos lo que decimos. El ruido no solo sale de nuestro interior, a veces en forma de queja, rabia u odio, también hay ruido en el exterior, de todas las voces que quieren ser oídas, de todas las tecnologías que se han creado para ensordecer nuestros pensamientos y nuestras almas y no dejar que escuchemos nuestro propio corazón.

      Jesús sabía del poder del silencio, y en multitud de ocasiones hizo callar a quienes buscaban desacreditarlo, hizo callar a quienes no querían creer en Él. Y también, en ocasiones callaba y dejaba que las obras hablasen por Él. Nos enseñó durante su vida que si queríamos hablar con Dios debíamos buscar un lugar tranquilo y estar en silencio.

     Por eso conviene que, de vez en cuando, nos apartemos del ruido que nos rodea y busquemos la paz del encuentro silencioso y transformador con el Padre. Así le sucedió a Elías que encontró a Dios en el silencio, y el propio Jesús que halló su fuerza ante la muerte que se aproximaba orando en soledad.

     Cuánto tenemos que aprender de oír en silencio. No solo a Dios, porque es muy necesario para el cristiano rezar y hallar la conexión espiritual con el Padre. También tenemos que estar abiertos a escuchar a los demás. Ser respetuosos cuando alguien nos habla, aunque no compartamos las mismas ideas. Nuestra sociedad necesita mucho de la escucha atenta y amorosa que Jesús practicaba.

     Aprovechemos estos días para visitar los templos, acercarnos al Sagrario y envolvernos en el silencio de la escucha atenta de las lecturas del Triduo.

     Aprendamos que el silencio es necesario y sanador. No nos dejemos anestesiar por el ruido de la fiesta, el tumulto y las voces. Mantengamos la mirada
silenciosa ante los pasos y que nuestra voz se oiga en nuestro corazón con una oración pidiéndole a Dios que nos haga mejores personas.

María del Carmen Fernández de Haro.

Vocal de Formación.

Cuaresma 2024.

 

“Y nosotros, ¿Qué debemos hacer?"

“Y nosotros, ¿Qué debemos hacer?»
(LC 3, 1018)

La gente le preguntaba: «Entonces,
¿qué debemos hacer?» Y Juan les
respondía: «El que tenga dos túnicas,
comparta una con el que no tiene ninguna, y el
que tenga comida, haga lo mismo.» También
unos cobradores de impuestos llegaron para
ser bautizados, y le preguntaron: «Maestro,
¿qué debemos hacer nosotros?» Él les dijo:
«No cobren más de lo que deban cobrar.»

Unos soldados también le preguntaron: «Y
nosotros, ¿qué debemos hacer?» Y Juan les
respondió: «No extorsionen ni calumnien
a nadie, y confórmense con su salario.»

Como el pueblo estaba expectante y todos
se preguntaban si acaso Juan sería el Cristo,
Juan les dijo a todos: “A decir verdad, yo los
bautizo en agua, pero después de mí viene uno
que es más poderoso que yo, y de quien no soy
digno de desatar la correa de su calzado. Él los
bautizará en Espíritu Santo y fuego”.

Este pasaje del Evangelio de San Lucas
nos muestra cómo debemos compartir con los
demás lo que tenemos. No basta dar lo que
sobra, sino lo que es justo, porque es cierto
que todos nos ganamos el “pan” con nuestro
trabajo. También en la vida tenemos la fortuna
de recibir bienes que podemos compartir ya
que en realidad no necesitamos tanto. Y en
la vida hay personas a las que se presentan
batallas difíciles de superar: Desempleo,
crisis, guerras, abandono…Es cuestión de
compensar, de ayudar a equilibrar la injusticia
de este mundo.

Vestir al desnudo, dar de comer al
hambriento… El Evangelio nos habla
continuamente de cómo amar a Dios y a
los hermanos. Y el amor a los demás no se
entiende si no se comparte lo que se tiene con
quien carece de lo más elemental.

Me viene a la mente la escena del ciego
Bartimeo (Marcos 10, 46-52) cuando haciendo
caso omiso a quienes les mandaban callar
gritaba con más fuerza: “Jesús, hijo de David,
ten compasión de mí”. Aprendamos de Jesús,
aprendamos con Jesús. No seamos sordos a las
necesidades de los demás, ni más ciegos que
el propio Bartimeo cuya confianza en Jesús
le hizo recuperar la vista, seamos generosos
y caritativos, no sólo con lo material sino
también con el amor y con nuestro tiempo.

Que Dios nos ayude a perder nuestra ceguera
y sin hacer caso a quienes nos digan que nos
callemos, sigamos rezando y pidiendo al Señor
por su compasión, para con todos.

 

Jefe de Trono. 2024

Como pasa el tiempo… De nuevo me dirijo a todos vosotros, a los horquilleros de San Juan, los que hacéis posible que esto sea una realidad año tras año demostrando la fe y la devoción que llevamos dentro. Me siento orgulloso de poder dirigirme a vosotros y sobre todo de poder guiaros un año más en nuestro día grande por el camino de la penitencia, se que sabéis de sobra el sentir que me mueve cada Semana Santa al lado vuestro.


Cuando estaba empezando este escrito para dirigirme a vosotros recuerdo con orgullo, como lo hicisteis el año pasado, la pasión que ponéis, me llena de sentimientos y ganas de estar ya en la calle mirando de frente a nuestro Cristo de la Buena Muerte a nuestra Virgen de la Amargura y a nuestro San Juan. Sí, me siento un privilegiado y os doy las gra
cias de corazón por todo lo que me dais cada uno de los horquilleros.

Nuestra función principal es la de acercar nuestras imágenes al pueblo con la elegancia que lo hacemos y de forma natural sin necesidad de alabanzas ni alardes de valentía, pero si, con el orgullo de ser horquilleros de San Juan.


Nuestra labor es muy importante para el mundo cristiano, la pasión y la devoción con la que vivimos la Semana Santa, en particular nuestro gran día el Jueves Santo, siempre en el anonimato, con el rostro cubierto en todo el recorrido demostrando el respeto por lo que hacemos y el respeto por lo que llevamos en nuestros hombros.


La Semana Santa es un momento que podemos utilizar para reflexionar, meditar y pensar sobre todo lo que hemos vivido durante todo el año y agradecerle a Dios y a nuestro San Juan por nosotros y por nuestra familia.


Al igual que en años anteriores seremos el reflejo de la fe por lo cristiano puesto en escena por nuestras calles de Almuñécar.


Hermanos, con el orgullo de ser horquilleros en nuestro pueblo, en nuestra Semana disfrutemos juntos un año más y que Dios nos de salud y fuerzas para seguir muchos más.


A nuestro Hermano Mayor te deseo lo mejor y que el Cristo de la Buena Muerte, la Virgen de la Amargura y San Juan te ayuden y te guíen en cada momento en tu nueva aventura para la que eres “ El Elegido “.


“Cuando la niebla de la incertidumbre trate de ocultarnos el mañana, la fe en Dios nos alumbra y nos señala el camino a seguir¡¡ VIVA SAN JUAN ¡¡ Y ¡¡VIVAN LOS HORQUILLEROS¡¡

Jefe de Trono. Boletín XXXIV. Año 2024

Camareras mantillas. 2024

     Llena de amargo dolor, Ella, la que encamina sus pasos al encuentro con su hijo por la senda del Gólgota.

Ella, que pese a hallarse en su momento más amargo, quebrando su ánimo y su fortaleza, no desfalleció.

Es en su imagen, donde observamos esa postura asombrosa y admirable con la que María, manifiesta su entereza y serenidad ante la adversidad. Por eso debe ser reflejo de todas las que la representamos como mujeres, como madres.

     Dicho esto, soy una hermana más, no sé por qué he de tener este privilegio, pero si Ella así lo ha elegido, vayan por delante los deseos de la Madre.

     Sólo tengo palabras de agradecimiento por todas vosotras, “las mantillas de San Juan”, orgullo por este grupo que formamos y que cada año se hace más grande, dando ejemplo en la calle del papel tan importante y crucial de la figura de la mantilla en la Semana Santa.

     Sólo os pido que al igual que María, seamos capaces de salir con el respeto y la serenidad que nuestro Jueves Santo se merece, para que seamos ejemplo y espejo en el que se miren al llevar a la calle el Evangelio de una forma diferente, pero desde la Fe.

     Para finalizar me despido con una pregunta para que reflexionemos:

     – ¿Habéis pensado en algún momento, por qué sois mantillas de San Juan?

     Yo si os respondo de manera rápida, tendría algunos nombres como responsables, pero con el paso de los años y las vivencias con “Ellos” he de decir que no fui yo quien eligió ser de esta cofradía sino que fueron “Ellos” los que guiaron mi camino hasta aquí.

     Sin más desearos una feliz Cuaresma y que viváis con Fe, nuestra semana grande.

Sheila González Ruiz

Cuaresma 2024

 

Vocalía de Juventud. 2024

Ya volvemos a encontrarnos en ese momento del año, ese maravilloso momento en el que se nos agolpan los recuerdos de años anteriores y nos llenamos
de incertidumbre por como saldrá todo.

En estos momentos me viene un recuerdo a la cabeza. Cuando solo era un niño, en el colegio mi maestra nos enseñaba las estaciones del año, los solsticios y los equinoccios.

Ella nos contaba que la primavera comienza el 20 de marzo y termina el 20 de junio, en ese momento le dije que se equivocaba, ella extrañada me pregunto, ¿por qué? A lo que yo respondí con total seguridad que la primavera empieza el Domingo de Ramos.

Y es que los cofrades, los jóvenes y los mayores comprendemos el tiempo de una forma distinta. Cualquier sexitano cofrade entiende que desde que suenan las campanas de la Encarnación la mañana del Domingo de Ramos cambia el ambiente en nuestro pueblo, todo se ve de otra manera y sin darte cuenta estas de nuevo en la “puerta Graná” esperando que salga la burra y sabes, que ha llegado la primavera.

Y personalmente hay un día que siempre está señalado en mi calendario, y por qué no decirlo, en mi corazón. El Jueves Santo es el día de mis Titulares, un día especial, como las personas que forman mi hermandad, gente distinta como sus horquilleros, que no hacen la primera ‘’levantà” con el tercer toque de campana si no con el último ¡VIVA SAN JUANICO!.

O sus mantillas para las cuales no tengo palabras, aunque diría que redefinen el concepto de elegancia y saber estar.

Pero sobre todo me quedo con toda la gente que trabaja y siempre está dispuesta a echar una mano para que esta cofradía siga adelante.

Cada Jueves Santo ellos son los responsables de que nuestros Titulares procesionen las calles, para que Almuñécar disfrute de su paso.

Quien haya visto la Semana Santa sexitana entiende que no es como la de una capital de provincia de Andalucía, pero no tiene nada que envidiar a ninguna de ellas, ya que nuestra Semana Santa desborda sentimiento y ganas. Ganas de mejorar de crecer y de darnos a conocer.

Creo que este año más que nunca empezamos a darnos cuenta de que tenemos que coger las riendas de esta gran tradición que se va legando de generación en generación para honrar la memoria de todos y todas las que vinieron antes que nosotros.

Tenemos el deber de compartir nuestro amor por nuestra Semana Santa, por nuestra hermandad y nuestros hermanos y hermanas, para que esto que tantos sentimientos nos despierta se mantenga vivo siempre para que podamos seguir disfrutando de nuestros Titulares en las calles sexitanas.

Os deseo una feliz Cuaresma y una mejor Semana Santa. 

Vocal de Juventud. Boletín XXXIV 2024

Cuaresma 2023. Saluda del Párroco de Almuñécar

Queridos hermanos de la «Cofradía de San Juan»:

Aprovecho  esta  oportunidad  que  me  da la  Cofradía  del  Santísimo  Cristo  de  la  Buena Muerte,  María  Santísima  de  la Amargura  y  San Juan  Evangelista    para  dirigirme  a  vosotros a  través  de  estas  breves  líneas.  Esta  Semana Santa  que  nos  disponemos  a  celebrar  será  para mí la primera que voy a compartir con vosotros como párroco.  Para mi esta realidad propia de la Parroquia de Almuñécar, con sus catorce cofradías de  penitencia,  es  algo  totalmente  novedoso  que vivo con ilusión y a la vez con la conciencia de la enorme responsabilidad que supone atender y servir a este campo de la Iglesia que es el mundo cofrade.

 Estoy  seguro  que  nos  esperan  días  intensos, donde  todos  nos  afanamos  en  preparativos y  detalles  para  que  las  cosas  salgan  lo  mejor posible y todo esté a punto en su momento. Sin embargo, creo que ese trabajo y ese esfuerzo de  preparación  para  la  Semana  Santa  tiene  una  doble  dimensión  que  siempre  tenemos  que tener muy presente: efectivamente todo lo relacionado con enseres, patrimonio, tronos, tronos, imágenes sagradas…. merece nuestra dedicación y nuestro esfuerzo, pero, ¿Qué ocurre con la parte espiritual y celebrativa?. Tampoco podemos descuidarla, ya que es precisamente eso lo  que  da  sentido  a  lo  primero.  Salimos  a  la  calle  a  manifestar  nuestra  fe  y  devoción  hacia nuestros Sagrados Titulares porque previamente hemos celebrado los misterios centrales de nuestra  vida  cristiana: la  Pasión,  Muerte  y  Resurrección  del  Señor.  Una  procesión  cobra  su sentido y es un testimonio público de fe cuando va acompañada de una experiencia cristiana seria y profunda de los que participan en ella. Se convierte en prolongación fuera del templo de lo que hemos celebrado dentro del mismo.

Con este deseo os invito a que nos dispongamos a celebrar el Triduo Pascual. Que sean realmente  días  de  encuentro  con  el  centro  mismo  de  nuestra  fe  como  cristianos,  días  de encuentro  con  el  Señor  y  días  de  encuentro  con  los  hermanos.  Que  María  Santísima  de  la Amargura,  presente  al  pie  de  la  Cruz  y  testigo  de  la  Resurrección  del  Señor  nos  ayude  a vivirlos con auténtico espíritu cofrade.

¡FELIZ PASCUA DE RESURRECCIÓN!

        Juan Antonio Arcos Segovia, Párroco de Almuñécar.

Cuaresma 2023. Saluda del Hermano Mayor

«No se turbe vuestro corazón, creed en Dios y creed también en mí. En la casa de mi Padre hay muchas moradas; si no, os lo habría dicho, porque me voy a prepararos un lugar. Cuando vaya y os prepare un lugar, volveré y os llevaré conmigo, para que donde estoy yo estéis también vosotros. Y adonde yo voy, ya sabéis el camino».

San Juan 14,1-4

Queridos hermanos y hermanas, comienzo estas palabras con las que me dirijo a vosotros todos los años con esta lectura del evangelio de Juan.

Este año es de luto, no estarán con nosotros acompañando a nuestros titulares, personas muy queridas en nuestra cofradía, que han cuidado, mantenido y transmitido esta forma de vivir y manifestar nuestra fe públicamente.

Leovigildo Estévez, Manolo Jerónimo y Antonia Rivas, nuestra Camarera Mayor, padres, madre y abuelos de toda una saga de familias unidas entorno a nuestra Cofradía. Mientras que pudieron ninguno de los tres faltó a su cita acompañando en su sufrimiento a Jesús crucificado a su Madre y el discípulo que Él amaba.

Acompañemos a nuestro Cristo de la Buena Muerte,  María Stma de la Amargura y San Juan sabiendo, que ya están con Jesús en las estancias que prometió. Descansen en Paz.

Se aproxima una nueva Semana Santa, un nuevo Jueves Santo y Viernes Santo. Este año por fin volveremos a vivir una Semana Santa con normalidad.  Me gustaría agradecer la labor incansable de mi junta de gobierno y las personas ajenas a la misma que trabajan por nuestra cofradía para hacer realidad toda la labor que se realiza durante el año y sobre todo para preparar la salida de Jueves Santo y Viernes Santo en “EL PASO”, sin  ellas no sería posible.

Todos compartimos que el Jueves santo es el día grande de nuestra Hermandad, donde queremos participar y engrandecerlo aún más si cabe, pero no es menos grande el Viernes Santo. “EL PASO” es la ceremonia que hace única nuestra Semana Santa, la de todos los Almuñequeros, y nuestra cofradía tiene el privilegio de participar de ella. Por ello quiero animaros a todos que participéis de ese privilegio, no os quedéis sin vivir ese momento acompañando dignamente a Nuestro San Juan, al que tanta devoción tenemos.

Desde estas línea quiero transmitiros mi deseo de cómo Iglesia que somos y miembros de esta gran hermandad que formamos en torno a nuestros Titulares, que viváis una Semana Santa en la que no nos quedemos en desfilar con nuestra cofradía, esto nos tiene que servir para hacer que nosotros y los que nos vean desfilar se acerquen más a Dios, de no ser así, lo que realizamos en nuestra estación de penitencia se queda en un acto sin contenido, el sentido de nuestra estación de penitencia es el de transmitir el mensaje de FE, PERDON Y AMOR, que nos enseñó Jesús, su Santísima Madre y su Discípulo Amado. Todo esto se comienza participando de las celebraciones litúrgicas que realiza nuestra parroquia durante la Semana Santa y especialmente el triduo pascual que se realiza el Jueves, Viernes y sábado Santo, animaos a asistir y vivir nuestra fe.

Sin más, me despido de vosotros deseando que nuestro Cristo de la Buena Muerte, María Stma de la Amargura y San Juan Evangelista nos guie en la vida por un camino de fiel a nuestra fe.

Que tengáis una buena estación de penitencia.

Francisco Jesús Matías Pérez

Cuaresma 2023.

La parábola de las diez vírgenes

VERTE COMO UN NOVIO QUE LLEGA Y NO COMO UN CRUCIFICADO

Tiempo de Cuaresma, tiempo de reflexión y de recuerdos.

Qué recuerdos quiero conservar de Jesús, del gran Maestro, del Hijo de Dios. Si pensamos en las imágenes del Nuevo Testamento podemos imaginarnos a Jesús en la montaña, encima de la barca, por las calles, hablando del Reino de Dios, consolando, ayudando, y comunicándose con esa autoridad y ternura de la que Él sólo era capaz.

Durante la Semana Santa los recuerdos se vuelven también más tristes. La imagen del crucificado, siempre presente en las iglesias, es como si, de repente, apareciera con más fuerza y empezamos a verla de verdad, a ver el dolor, el sufrimiento, la injusticia, la pena. Recordar la Pasión de Cristo es duro y necesario, no lo niego, pero se me viene a la mente un recuerdo más amable y que se me hace hoy necesario, verlo como un novio, esperarlo de nuevo, llenando mi lámpara de aceite para que su luz le demuestre que estoy aquí, atenta y preparada.

Para entender esta reflexión personal tenemos que recordar la parábola de las diez vírgenes (Mateo 25). En esta parábola, el Salvador nos enseñó la manera de prepararnos para su segunda venida.

Nosotros tenemos que ser como las cinco vírgenes prudentes, que lo esperaron con sus lámparas encendidas, sin saber el tiempo que tenían que esperar pero con la confianza de que era real y que llegaría. El tiempo de preparación para la venida de Cristo es ahora. En esta cuaresma, en este momento. No podemos dejar para más adelante nuestra preparación, las oraciones que necesitamos, las misas en las que tenemos que participar, la piedad, la misericordia, la fe y la confianza son ahora.

Para las vírgenes de la parábola el estar listas era tener suficiente aceite. Para nosotros, estar listos quiere decir aceptar a Jesús como Señor y Salvador y vivir de acuerdo al Espíritu.

Esa luz encendida y que no se apaga es la presencia perdurable de Dios en nuestra vida que nadie puede apagar. Y es un Dios vivo, que habita entre todos, y por eso no podemos quedarnos solo en su imagen de despojado, de atado a una columna, de portador de una cruz o de crucificado, ni siquiera de resucitado. Es mucho más, es nuestro Padre, nuestro Salvador, es un “Novio” al que tenemos que esperar porque no sabemos el momento en que se producirá su segunda venida, y debemos prepararnos para ella como si pudiera producirse en cualquier momento.

Ese aceite, que representa nuestra fe y testimonio, nuestras buenas obras y el hecho de que guardamos los mandamientos es la manera de demostrar que hemos tomado al Espíritu Santo como guía. Y tenemos que recordar que las vírgenes prudentes no podían compartir su aceite con las insensatas, ya que “el aceite de la preparación espiritual no se puede compartir”.

A veces nos confiamos y pensamos que tenemos lo suficiente para salir adelante. Debemos ser prudentes porque, seguir al Salvador significa mucho más que sólo salir adelante. Implica esforzarnos siempre por acercarnos más a Él, y prepararnos para los momentos en los que se pondrá a prueba nuestra paciencia, fe y testimonio.

Vivamos esta Cuaresma de manera que agreguemos, gota a gota, aceite a nuestra lámpara.

María del Carmen Fernández de Haro.

Vocal de Formación y Cultos.

Cuaresma 2023.

 

Jefe de Trono. Cuaresma 2023

De nuevo el sentimiento cofrade empieza a correr dentro de nosotros.

Se acerca el momento que esperamos con ansias cada año.

Solamente deciros que este año estéis igual de comprometidos que estos años atrás; y a los que salen este año por primera vez, deciros que os dejéis llevar por vuestro sentir y que abráis vuestro corazón hacia los Titulares, porque el Jueves Santo vosotros y el resto de hermanos vais a ser los guieis y llevéis la Fe por todos los rincones de Almuñécar, pero tened en cuenta que a partir de ese día, serán nuestros Titulares los que os guíen para siempre por ese camino de la FE cristiana.

El Jueves Santo tenemos una labor muy importante para esta vida cristiana que hemos elegido, demostrando nuestra FE y Devoción, haciendo penitencia a lo largo del recorrido. Siempre en el anonimato con el rostro cubierto en todo el recorrido, demostrando el respeto por lo que hacemos y por lo que portamos encima de nuestros hombros.

Pensad que un pueblo entero espera cada Jueves Santo para ver nuestras imágenes andar al compás de cada marcha y como ponemos nuestra Alma y nuestra Fe en cada paso que damos.

“Cuando el olor a claveles impregne el Templo de El Salvador y sintamos el cosquilleos dentro de nosotros, nos daremos cuenta que esa es la señal de que ya estamos preparados para nuestro Jueves Santo, para realizar nuestra estación de Penitencia”.

Disfrutad mientras la vida os lo permita, como hizo nuestro hermano Manuel Jerónimo Morales, al que este año echaremos de menos, aunque seguro que nos estará viendo desde un lugar privilegiado, en ese palco que tiene nuestra cofradía para todas aquellas personas que han luchado y trabajado por esta gran familia que es la Cofradía de San Juan. Siempre estarán en nuestros corazones. Descansa en Paz hermano Manolo.

“Cuando la niebla de la incertidumbre trate de ocultarnos el mañana, la Fe en Dios nos alumbra y nos señala el camino a seguir”.

Que el reflejo de la pena, dolor y amargura que expresan en su rostro nuestros Titulares, nos guíen un año mas por el buen camino de la penitencia que hacemos cada Jueves Santo.

Ya estamos preparados para demostrar en cada toque de campana que somos uno.

¡Viva el Cristo de la Buena Muerte!, ¡viva nuestra Virgen de la Amargura! y como decía nuestro hermano Manolo “El cabezuo”:

¡Viva San Juanico! ¡Al cielo con ellos!

 Joaquín Contreras Pérez

Camareras Mantillas 2023

En pocos días, viviremos de nuevo unos momentos inolvidables, cuando tengamos a nuestros titulares por las calles de Almuñecar.

Son ya muchas Semanas Santas en mis pies, pero sigo sintiendo las mismas ganas y ese cosquilleo en la barriga como si fuese mi primera vez.

 Para mí el Jueves Santo es fin y principio de todo, de un año que se marcha y otro que llega. Como si de un ritual se tratase preparo cada detalle, desde mi rosario, pilar fundamental en mi vida puesto que es a Él a quien recurro en mis momentos de flaqueza y a quien agradezco en mis momentos de alegría, hasta el pañuelo que me acompaña a lo largo de mi estación de penitencia… todo listo… todo al coche… comienza mi Jueves Santo.

Con este son ya 17 años como mantilla, en los cuales he descubierto el recogimiento y encuentro conmigo misma desde la Fe, el respeto y el cariño hacia nuestros titulares.

Siempre admiré el grupo de mantillas de nuestra cofradía, el orden con el que iban, esas miradas de devoción que en silencio transmitían, la organización y el respeto en la calle. Para mí pensaba, ¡qué difícil debe de ser que todo salga perfecto!. He de decir que no es fácil, que no siempre se puede contentar a todas, que el tiempo nos lo pone difícil en muchos momentos y que esos nervios que sentimos a veces nos juegan malas pasadas.

 Pero desde aquí y como parte de esta familia que formamos, quería daros las gracias por hacer que todo sea tan fácil, por cumplir las normas de decoro y respeto, incluso en las peores condiciones, por darlo todo sin recibir nada material a cambio, por no perder vuestra sonrisa, por aguantarme y seguirme en esta locura y demostrar cada Jueves Santo que las mantillas de San Juan somos especiales, que somos un equipo pero sobre todo, sabemos llevar a la calle la devoción y el respeto que nuestros titulares merecen.

Os dejo con una frase que me acompaña siempre y que en cierto modo refleja a nuestras mantillas, ya que como María nunca lo abandonamos y siempre estamos Su lado. Desearos una buena estación de penitencia pero sobre todo disfrutad de nuestro Jueves Santo.

 “Dios Padre creó un depósito de todas las aguas y lo llamo mar… de manera similar creó un depósito de todas las gracias y lo llamó María”. San Luis María Grignion de Montfort.

Sheila González Ruiz

Cuaresma 2023

 

Cuaresma 2022. Saluda del Hermano Mayor

Queridos hermanos y hermanas:

Cómo sabéis he sido reelegido como vuestro Hermano Mayor.

Gracias por volver a confiar en mí, continuaré trabajando con la junta de gobierno que presido, con más esfuerzo e ilusión en los años siguientes.

Quiero agradecer a las personas que no han podido continuar en esta junta de gobierno su apoyo durante estos cuatro años.

A los miembros de la junta que sí continúan y a las nuevas incorporaciones dar todo el ánimo a seguir trabajando con todas sus fuerzas para seguir cumpliendo los objetivos y los fines que nos propusimos cuando comenzamos este proyecto, dar testimonio público del Amor de Dios a los hombres mediante la ayuda al prójimo, el ejercicio de la caridad y el Culto a nuestros Sagrados Titulares.

Estamos viviendo una nueva Cuaresma y a las puertas de la Semana Santa, pero ésta no va ser una Semana Santa cualquiera.

Han sido dos años muy duros para todos nosotros sin poder realizar nuestra Estación de Penitencia, pero lo más importante que poseemos es, al fin y al cabo, la salud y por ello debemos dar gracias al Santísimo Cristo de la Buena Muerte, María Santísima de la Amargura y San Juan Evangelista por protegernos y darnos la posibilidad de seguir participando activamente de la vida de nuestra hermandad durante todo el año.

Hace dos años vivimos estos días confinados en nuestras casas, vivimos momentos de tristeza y emoción por no poder estar juntos en torno a nuestros Titulares; el año pasado pudimos compartir un día en convivencia en torno a ellos, un día muy especial, en el que hubo momentos de oración, de recogimiento, de alegrías, con la entrega de diplomas y medallas a nuestros nuevos hermanos/as, y como no, de agradecimiento a aquellas personas que estuvieron en primera línea y siguen estando en la lucha contra este virus que tanto daño está haciendo.

Este año, si Dios quiere y la situación sanitaria así lo permite, va a ser en el que podamos volver a salir a la calle.

Os quiero animar a participar en los preparativos de esta Semana Santa, como siempre, las puertas de nuestra hermandad están abiertas a todos/as y cada uno/a de vosotros/as.

Este Jueves Santo cuando nuestra cofradía esté en la calle que seamos transmisores del Amor a nuestros Sagrados Titulares, y por tanto a Dios, acompañando a nuestro Cristo, rezando junto a su Madre y a su Discípulo Amado.

Un fuerte abrazo y que Dios os bendiga.

Francisco Jesús Matías Pérez

Cuaresma 2022.

Vocalía de Juventud. 2023

Un año más nos vemos a las puertas de nuestra semana más querida esa semana a la que cualquier cofrade hace suya y vive de una manera especial, en la que cada momento es único y la cual no se vive nunca de la misma manera.

Como joven cofrade debo decir que me entristece ver como el interés por esta tradición religiosa poco a poco va teniendo cada vez menos peso entre la juventud de nuestro pueblo, aunque también me alegra recalcar que muchos de los jóvenes de nuestro municipio sexitano ya se están poniendo al frente de alguno de los actos cofrades que este ha ofrecido en estos últimos años. Y muchos no dudan en aportar distintos puntos de vista a la hora de entender la semana santa sexitana.

Creo que el panorama de la Semana Santa actual se está viendo marcado por el contenido en redes sociales, donde la juventud pasa la mayor parte del tiempo, lo que está provocando una idea (en mi opinión) equivocada de lo que este municipio necesita, ya que creemos que los diez minutos de un video que vemos en internet sobre Semana santa de cualquier parte de la geografía andaluza y que nos pone los vellos de punta, es aplicable a la nuestra, y no siempre tiene por qué ser así. Creo que muchos cofrades tanto jóvenes como no tan jóvenes cometemos un fallo a la hora de comparar como se hacen las cosas en un sitio u otro, en lugar de ello deberíamos creérnoslo un poco más y entender que la Semana santa sexitana es como es, es varal, trabajadera y costal, es la variedad en todos los aspectos para una misma Semana Santa y debemos estar orgullosos de ello y apreciarlo.

En estos tiempos en los que la globalización hace que unos pocos marquen las directrices a seguir me gustaría que no se perdiera nuestra esencia. Yo personalmente, Manuel Fajardo Corral, no siento ninguna vergüenza al decir que soy hermano de la cofradía del Stmo. Cristo de la Buena Muerte, María Stma. de la Amargura y San Juan Evangelista, la de los «viva San Juanico ´´ las interminables mecidas al son de Alma de Dios, las mantillas rojas y nuestro incansable relato sobre San Juan en el «Paso». Esa es nuestra esencia, nuestra idiosincrasia, es lo que no hacemos ni mejor ni peor que nadie, pero hacemos diferente y por ello lo hacemos solo nuestro, por lo que espero aprendamos y enseñemos a respetar nuestra propia Semana Santa para que siga siendo nuestra, para que siga siendo sexitana.

Vocal de Juventud. Boletín XXXIII 2023

Cuaresma 2022. Saluda del Párroco de Almuñécar

Queridos hermanos de la «Cofradía de San Juan». Que la Paz de Nuestro Señor Jesucristo, al Amor del Padre y la Comunión del Espíritu Santo habiten siempre vuestras vidas.

Quizá no exista Semana Santa más deseada que la que estamos a punto de vivir este 2022.

Semana Santa con la que todos los cofrades soñamos y anhelamos desde que hace dos años, a las puertas de la Semana Santa de 2020 nos cambió la vida.

Este año la Semana Santa llega cargada de ilusión, de ganas de ver a nuestros Titulares por las calles de nuestro pueblo, de escuchar las marchas como banda sonora de nuestra semana más grande.

Pero toda esa ilusión y expectativa no puede sin embargo quitarle un ápice de importancia a aquello que llevamos todo estos años celebrando, aquello que nunca se perdió, aquello que nunca nos quitaron.

La Muerte y Resurrección de Cristo la hemos seguido celebrando cada año. De hecho, la celebramos cada día en la Eucaristía, en el enfermo, en el que sufre. Y eso es lo que vamos a sacar este año, por fin, a la calle en los días de nuestra Semana Santa.

Esos días vamos a decirle a nuestro pueblo, al que cree y al que no cree, que Cristo sigue presente en nuestras calles y plazas, en nuestras casas y nuestras familias y que lo único que tenemos que hacer para verlo es abrir nuestro corazón.

Oro porque esta Semana Santa la disfrutéis y la viváis como nunca, y sobre todo que se la hagamos disfrutar a todos los que nos vean, porque vean a Cristo mismo reflejado en nuestros rostros.

Vuestro párroco.

Vicente M. Guerrero García.

Cuaresma 2021. Saluda del Hermano Mayor

Queridos hermanos y hermanas:

Quiero comenzar esta misiva expresando mi deseo de que estéis bien y gocéis de buena salud, vosotros y vuestras familias.

En nuestra cofradía rezamos por todos y cada uno de nuestros/as hermanos/as y sus familias, os tenemos siempre presentes. Quiero hacer llegar nuestro cariño y apoyo a quienes lo están pasando mal o han perdido a un ser querido. La salud es un bien muy preciado que sólo apreciamos cuando se pone en peligro. Sabéis que vuestra hermandad siempre estará con vosotros.

Me gustaría tener un reconocimiento muy especial hacia nuestros mayores ya que esta pandemia ha sido especialmente dura con ellos: ellos han sido la generación que ha luchado para que hoy en día, tanto en las hermandades como en nuestra vida cotidiana seamos lo que somos. Ellos son un modelo a seguir; que nunca se nos olvide. No podemos darles la espalda.

No quiero olvidarme de la juventud, esa juventud que durante esta pandemia ha sido considerada la “culpable de todos los males”, una afirmación con la que no estoy nada de acuerdo. Es cierto que han habido algunos jóvenes irresponsables, pero no se puede meter a todos en el mismo saco. Por lo general han sido y son responsables, incluso más que muchos mayores. A vosotros jóvenes, no os desesperéis, pronto todo esto pasará y volveréis a poder disfrutar de todo. No veáis este tiempo como un tiempo perdido, sino como un tiempo en el que poder aprender. Pronto volveremos a sacar a nuestros Titulares por la calles de Almuñécar.

Como sabéis, el Arzobispo de nuestra Diócesis ha publicado un decreto por el que se suspendía el culto externo como medida de prevención ante el avance de la pandemia. No os puedo negar que desde mi junta de gobierno nos apena no poder salir a la calle, pero somos comprensivos y sensatos; ante todo está la salud de todos.

Esto supone que por segundo año consecutivo no habrá procesiones en la calle y que por tanto nos tenemos que preparar para una nueva Semana Santa, diferente, pero igualmente ilusionante.

Desde esta junta de gobierno en colaboración con nuestro Parroco Don Vicente García y la Agrupación de Cofradías no paramos de darle vueltas a la cabeza para realizar cultos y actividades dignas de nuestros Titulares y la hermandad que representamos. Por eso estamos haciendo todo lo posible para hacer que esta Cuaresma y Semana Santa sean inolvidables.

Durante la Cuaresma tendremos un día dedicado a nuestra hermandad en la que podremos rendir culto a nuestros Sagrados Titulares sin que ello suponga perjuicio alguno para los hermanos. Pero para ello es necesario vuestra colaboración, asistiendo a los diferentes actos. Se os informará debidamente del día, los actos a realizar y las medidas de seguridad a tomar.

Por último, sabemos que es un tiempo complicado, que se hace difícil poder visitar la Parroquia, pero siguiendo las medidas de seguridad los templos son un lugar seguro.

Os invitamos a visitar a nuestros titulares, a dedicarles unos minutos, a rezarles y hablarles, pero somos conscientes de que la movilidad hoy en día es difícil. Para aquellos que no puedan visitar nuestro templo, podéis hacerlo allá donde estéis, acordaos de ese Cristo clavado en la cruz que se entregó por salvarnos, de esa Madre María Santísima de la Amargura, un ejemplo de Amor y Dedicación, y nuestro querido San Juan el discípulo que siempre estuvo con Jesús. Seguro que en estos tiempos difíciles os ayuda.

Me despido deseando poder veros pronto, llenando los pasillos en busca de vuestra velas, en los ensayos de trono, en las reuniones de hermanos o para echar una mano limpiando enseres o un rato de charla con otros hermanos.

Cuidaos mucho y cuidad a los que tenéis cerca, tomad todas las precauciones y confiemos en que pronto se erradique esta pandemia.

Apoyémonos en Jesús, en su Bendita Madre y en el Discipulo Amado, porque ellos nunca nos fallan, jamás lo han hecho.

Un fuerte abrazo de vuestro Hermano Mayor

Francisco Jesús Matías Pérez.

Cuaresma 2021.

El verdadero camino de vuelta a casa

«La Cuaresma, explicó el Papa Francisco en su homilía durante la misa del Miércoles de Ceniza, celebrada en la Basílica de San Pedro el 17 de Febrero, es un tiempo para verificar los caminos que tomamos, para encontrar el camino que nos lleva de vuelta a casa, para redescubrir el vínculo fundamental con Dios, del cual todo depende”.

La vuelta a casa.

Y parece increíble pensar que hace un año quedarnos en casa fue nuestra salvación, y aún hoy lo sigue siendo. Nuestra casa, que se convirtió en un pequeño mundo donde descubrimos y redescubrimos tantas cosas.

Pero, por supuesto, no es esa casa a la que se refiere el Papa. Estamos viviendo tiempos muy difíciles y creo que hacía mucho que rezar no era tan necesario, que hacía mucho que no pensábamos tanto en los demás, que no compartíamos tantos sentimientos con nuestros hermanos y hermanas del mundo, que no valorábamos tanto la salud, la vida y la fe. Hemos sentido que Dios, como decía Santa Teresa, no se muda, porque lo sentíamos a nuestro lado, estuviéramos en casa o en el hospital, en las calles o en las residencias, o en los miles de balcones y terrazas, o incluso en las cientos, miles, millones de pantallas que sirvieron de consuelo a tantas personas. Porque Dios no está en un lugar, sino junto al corazón de tantas y tantas personas de fe y buena voluntad, y es a esa casa a la que tenemos que volver.

Dice el Papa que de Dios todo depende, y yo añado que con Dios todo lo podemos. Se acerca otra Semana Santa, y mejor que la anterior porque, aunque con restricciones y medidas, al menos podemos compartir la Eucaristía y vivir el Triduo Pascual sintiendo la presencia de nuestros hermanos y hermanas. Y por ello debemos dar gracias a Dios, y pedir por los que se marcharon y están junto a Él. ¿Llegará otra Semana Santa que se parezca a la que vivimos antes de la Pandemia? Seguro que sí, se parecerá en muchas cosas. Pero siempre será distinta.

De nosotros también depende encontrar ese camino de vuelta a casa, si nos dejamos guiar de la mano del Padre. Aprender de lo desaprendido. Valorar lo verdadero. Amar lo que es Amor, así con mayúsculas. “Convertíos”, Dios no se cansa de recordarlo todos los años. “Creed en el Evangelio”.

Que Dios nos ayude a encontrar el camino que conduce hasta la salvación, y que nos lleve a su casa, nuestra verdadera casa.

María del Carmen Fernández de Haro.

Vocal de Formación y Cultos.

Cuaresma 2021.

 

Saluda del Párroco de Almuñécar.

Queridos hermanos de la cofradía del Santísimo Cristo de la Buena Muerte, María Stma. de la Amargura y San Juan Evangelista.

Que la Paz de Nuestro Señor Jesucristo, al Amor del Padre y la Comunión del Espíritu Santo habiten siempre vuestras vidas.

 Cada año desde mi llegada, he escrito esta carta para desearos a todos una feliz Semana Santa. Este año, al igual que el pasado va a ser una Semana Santa diferente para todos los que con cariño y entrega os dedicáis desde hace muchos años a organizar una estación de penitencia para el Jueves Santo con vuestros titulares.

Este año no vais a poder disfrutar de ellos en la calle, no vais a poder poneros debajo de vuestro paso, o acompañarlo por las calles de nuestro pueblo, pero no por eso debéis de dejar de vivir la Semana Santa con la misma intensidad que todos los años.

Quizá vuestras imágenes se queden dentro del templo, pero ellas en vosotros pueden salir a la calle a conmemorar de nuevo la Buena muerte de NuestroSeñor Jesucristo, a vivir con intensidad la Amargura de su madre el verlo sufrir, o la lealtad del discípulo amado al no abandonar a su maestro.

Porque la Buena Muerte se conmemora al recordar cada día a todos aquellos que dan su vida por nosotros, al cuidarlos, al amarlos. La Amargura se vie al hacer nuestro el sufrimiento de los demás, de los que se quedan sin trabajo, de los que pasan necesidades, de los que han muerto fruto de esta pandemia. Y la lealtad de San Juan se hace vida acercándonos a aquel que muere por nosotros, celebrando con intensidad la Santa Cena del Jueves Santo, los oficios del Viernes Santo y la gran fiesta de la Resurrección.

 Hay motivos más que de sobra para vivir esta SemanaSanta aunque sea de una forma diferente ala que estamos acostumbrados. No perdamos la oportunidad.

Que Dios os bendiga.

Vuestro párroco Vicente Guerrero García.

 

Carta del Jefe de Horquilla. Cuaresma 2021

 

Sólo  con  pensar  que  me  dirijo  a vosotros  (horquilleros),  florecen los  sentimientos,  me  vienen recuerdos  y  momentos  que hemos vivido,  juntos,  cada año.

Estaremos un año más si poder disfrutar de algo  que  nos  llena  y  nos  une,  nuestra Semana Santa. Pero si volvemos la mirada hacia este año, que  hemos  pasado,  que  no  saquemos  a nuestro San Juan  es  lo  de menos, que nos puede pasar.

Esto que nos ha tocado vivir, nos marcará para  siempre,  dicen  que  saldremos  de esto  más  fuertes,  pero  el  miedo,  la desconfianza y la incertidumbre de cómo seguiremos viviendo, está con cada uno de nosotros y de nuestras familias.

Tenemos  el  deber  de  luchar  por  esto  que tanto nos gusta y llevamos tan adentro de nosotros, inculcando a nuestros hijos para que este sentir, no se pueda perder nunca.

Espero de corazón que todos estéis bien y nos veamos pronto.

Que no perdamos nunca la Fe cristiana y ese sentimiento que nos hace únicos, que pronto volveremos  a  sentir  llevando  sobre nuestros hombros  a  nuestras  Imágenes  saliendo  del Templo  del  Salvador  o  subiendo  la  Cuesta Helga Söhnel escuchando nuestra agrupación tocando «Alma de Dios».

Solo  nos  queda  ser  pacientes,  no  perder  la esperanza  y  sobre  todo  cuidarnos  de  esta prueba  más,  que  nos  pone  la  vida  y  pensar que ellos, nuestro Cristo de la Buena Muerte, nuestra  María  Santísima  de  la  Amargura  y nuestro «San Juanico» nos estará esperando.

Vuestro Jefe de Horquilla que os echa de menos.

 

 ¡¡VIVA SAN JUANICO¡¡          Y ¡¡VIVAN LOS HORQUILLEROS¡¡

Joaquín Contreras Pérez

La esperanza no defrauda; no es una ilusión

“¿No  eres  más  feliz  recordándome

como realmente era,  que viéndome día

 a  día  viviendo  sin  vivir,  conectado

hasta que tú quieras?”

Este año es la frase que más he recordado, frase  de  mi  paciente  con  16  años,  antes de  ser  intubado  en  la  UCI.  Frase  que le decía  a  su  madre,  rota,  sosteniendo su  mano  sabiendo  que  eran  los últimos minutos que pasaría al lado de su hijo.  Ejemplo  de  fortaleza,  de  vida  más allá de lo  que  entendemos  por  vida,  pero que  no  es  más  que  la  historia  de nuestra  Fe  llevada  a  la  realidad,  esa que  día  a  día  nos  vemos  obligados  a afrontar.  Este  año  aún  más  duro  si  cabe, realidad que  ni en el  peor  de  nuestros sueños podríamos llegar  a  imaginarnos pero  que  nos  ha  tocado  vivir.  Por  lo menos  Pablo,  que  así  se  llamaba  mi paciente,  si  tuvo  la  mano de  su  madre cerca en sus últimos momentos.

Queridas hermanas camareras/mantillas y hermanos, año  duro  y atípico  donde  los  haya, pero no  por  eso debemos perder la ilusión, las ganas  ni  la  Fe  de  seguir  celebrando, aunque  sea desde  nuestras  casas  nuestra semana  más  grande.  Os  invito  a  que preparéis  todo  con  el  mínimo  detalle como  haríamos  cualquier  Jueves Santo, vestíos, rezad, cerrad los ojos, por un  momento  estamos  allí  …  el  olor  a incienso  nos  inunda,  los  nervios,  la mirada  a  ellos  por  última  vez  antes  de que  la  puerta  se  abra,  ese  toque  de campana,  las  oraciones  entre  todos  en voz  alta  y  ese  ¡VIVA  SAN  JUANICO!  

No  dejéis  de  imaginaros  ese  momento, que  es  sólo  nuestro  porque  en  cuanto volvamos  abrir  los  ojos,  estaremos  todos de nuevo viviéndolo. 

Si  algo  he  aprendido  este  año,  es  la capacidad  de  ayuda  y  de  entrega  de muchísima gente, de darlo todo sin poder esperar  nada  a  cambio,  esto  es  Fe  y  es la  nuestra,  así  que  vivámosla  y hagamos  participe  de  ella  a  todo aquel que tengamos a nuestro lado.

Me  despido  con  una  frase  del  Papa Francisco “Es una esperanza: la esperanza no  defrauda;  no  es  una  ilusión,  es  una esperanza”.

 Sheila González Ruiz

Cuaresma 2021

 

 

Saluda del Presidente de la Agrupación de Cofradías. Cuaresma 2021

La Cuaresma vuelve a llamar a las puertas de nuestra ciudad.

Todos  los  preparativos  para  celebrar  la Semana  Santa  comienzan  a  ser  una realidad  en cada  rincón  de  nuestras calles,  comercios,  casas  de hermandad, templos, locales de ensayo…..

A  tan  solo  cuarenta  días  para  que  la primera  cruz  de  guía  haga  su aparición  a  las  puertas  de  la  Iglesia Parroquial  de  la Encarnación,  la  gente presiente  que  todo  ha  de  estar preparado para  lo  que  ha  de  llegar  y que, además, se espera con anhelo.

En  verdad,  todos  sabemos  que comienza  la  cuenta  atrás.  En  las noches  podemos  contemplar  en nuestras  calles  los  ensayos  de cuadrillas  de  costaleros  y horquilleros.

También  podemos escuchar  los  sones de  las  bandas  y  agrupaciones musicales  realizando sus ensayos. En  definitiva,  Almuñécar  comienza  a cambiar  para  adecuarse  a  esta celebración centenaria.

Los  establecimientos  comerciales también  se preparan  para  la  llegada de  lo  que  se  espera. Los escaparates,  cada  vez  más, comienzan  a  mostrar  imaginería, orfebrería  e  incluso  se  visten  con los  colores  de  la  pasión,  aparecen los  carteles  en  sus puertas  e  incluso los  establecimientos  hosteleros cambian sus tapas y menús con recetas propias del momento cuaresmal.

Todo  va  fluyendo  como  cada  año, pero  lamentablemente,  todo  es  un espejismo  de  lo  que nos gustaría que sucediera,  pues  la  cruda  realidad  la marca la Covid-19. En este tiempo que  vivimos actualmente nos encontramos  como  se  encontró Jesús en los peores  momentos de su pasión: solo y con las  manos atadas.

Tomaremos  nuestra  cruz  y  le seguiremos,  porque  sabemos  que Jesús es la vida que se abre camino.

Así  que,  pongamos  nuestras esperanzas  en  2022  (D.m.)  para poder  disfrutar  de  una  cuaresma  plena que nos llevará a disfrutar  de nuestros titulares en nuestras calles.

Debemos  recordar  que  somos nosotros  los  que  cambiamos  cada cuaresma,  los  que   cambiamos  de alguna manera la ciudad.

José Carlos Linares Moya

Presidente  de la Agrupación de Cofradías y Hermandades de Semana Santa de Almuñécar

Cuaresma 2021

Carta del Hermano Mayor. Jueves Santo 2020

9  de Abril de 2020.

Jueves Santo, despierto a las 7:00 de la mañana, en este momento caigo en la cuenta que mi amigo Antonio me pidió que escribiera unas palabras para ti, hermano, y de lo único que puedo escribir es sobre mi sentimiento en el día de hoy.

Una sensación extraña recorre mi mente y pienso: “es Jueves Santo no puedo hacer lo que llevo tantos años haciendo. Comienzo a recordar esa rutina anual, que por más rutina que sea, cada año es un nuevo comenzar, porque para mí ese día no es el final de un año de trabajo; es el comienzo de un nuevo año de ilusión, de amistad que se ha ido forjando con los años con esas personas que comparten tanto y tanto tiempo trabajando por nuestra cofradía y que hoy se renueva nuevamente.

Recuerdo los momentos de Jueves por la mañana en la que todos quedamos para compartir un desayuno, unas risas y quitarnos esos nervios que nos atenazan; llamadas telefónicas para ver cómo van todos los preparativos y caigo en la cuenta que no hay que llamar a nadie porque todos saben perfectamente lo que tienen que hacer. Son las mejores personas de las que me podía rodear.

Subo al templo, ya con los pasos montados y antes de que se abran las puertas busco un momento de paz junto al Santísimo y a nuestros Titulares. Les digo que ya lo tenemos todo montado y que todo lo que ocurra esa noche está en sus manos.

En esa bendita rutina, se va la mañana y llega el momento de prepararse para la salida, lo nervios me atenazan aún teniendo claro que las cosas saldrán bien; se abren las puertas y sale la Cruz guía. Comienza este nuevo año.

Hermano, quiero con estas palabras darte ánimo para que pases este día recordando esa bendita rutina tuya, en la que te despiertas pensando en el momento de la salida de nuestra Cofradía; en esa bendita rutina de los preparativos, con tus hijos, padres y abuelos, en esos nervios, en ese amor por tus Titulares, en ese sentimiento que no te deja dormir y hace que te despiertes este día más temprano que nunca, porque no olvidéis que hoy no es el fin de un año de espera; es el comienzo de otro maravilloso año de Amor a nuestros Titulares, de Hermandad y amistad.

Este año, las circunstancias por las que no podemos hacer Estación de Penitencia son de sobra conocidas por todos vosotros. Esta pandemia que se está llevando tantas y tantas vidas, está haciendo que muchas familias pasen por ese duro momento de despedir a un familiar, sin estar acompañados por sus familiares y amigos; tantos y tantos enfermos que pasan su enfermedad en la desesperación de la soledad …

Duros momentos para tantas familias que se han quedado sin sustento, a las cuales tenemos el deber de ayudar.

Estas duras circunstancias las vamos a superar estando todos unidos, apoyando desde nuestros hogares a los que están trabajando por los demás: médicos, enfermeros, policía, guardia civil, ejército, policía local, etc.

Sé que son duros momentos, pero tenemos la oportunidad de vivir la Semana Santa de una forma diferente; celebrando el Triduo Pascual que comienza hoy y termina el sábado en la Vigilia Pascual, para unirnos más a Jesús, conociendo lo que hizo por nosotros, y que nuestro corazón se inunde del Amor de Dios. Os animo a que viváis el Triduo Pascual a través de las diferentes redes sociales desde donde se transmite.

Solo os quiero pedir una última cosa, que el día de hoy no olvidéis vuestra “bendita rutina”. Preparad en casa vuestras túnicas, mantillas, y trajes como cada año, haced fotos y ponedlas en las redes sociales, compartidlas con los amigos y familiares. No perdáis esa ilusión de acompañar o portar a vuestros Titulares, y transmitidla a los demás.

Porque de esa manera tened muy claro que, hoy nuestros Titulares desfilarán en el corazón de cada uno de nosotros.

Muchos abrazos y que el Santísimo Cristo de la Buena Muerte, María Santísima de la Amargura y San Juan Evangelista os bendiga y proteja a todos.

Francisco Jesús Matías Pérez

Hermano Mayor

 descarga carta del hermano mayor

Saluda del Hermano Mayor. Cuaresma 2019

“Estimado/a hermana/o:

En éste, mi segundo año como Hermano Mayor, me dirijo a ti, hermano/a, nuevamente con estas humildes palabras para dar un repaso a este año, un año que ha pasado muy rápido, lleno de trabajo y novedades.

Antes de nada, quiero dar las gracias a mi Junta de Gobierno que me ha apoyado, con ilusión y esfuerzo, en todas y cada una de las iniciativas que he propuesto. 

Dar las gracias, también, a las personas que trabajan desinteresadamente en los diferentes actos realizados, sin vuestro esfuerzo no sería posible la labor realizada.

Quiero tener unas palabras de ánimo y agradecimiento hacia nuestras mantillas, por la entrega y devoción con la que realizan la Estación de Penitencia, siendo ésta un ejemplo a seguir, os animo a seguir trabajando en ese sentido, a los hermanos horquilleros por el esfuerzo y la fe con la que portan a nuestros Titulares por las calles de nuestro pueblo, a todos los hermanos que portan las insignias de nuestra hermandad, y a todos y cada uno de los penitentes, que iluminan nuestro cortejo acompañando a nuestros Sagrados Titulares, gracias de todo corazón.

Como sabéis este año es el XXV aniversario de la salida procesional de Nuestra Madre María Santísima de la Amargura, pero no solo hace 25 años de la llegada de Nuestra Madre a esta hermandad, sino que también es el XXV aniversario de la culminación de un proyecto ilusionante, que comenzó en 1983 cuando la Junta de Gobierno capitaneada por Francisco Aguado, decidió que esta cofradía pasaría a procesionar con un Paso de Misterio, encargando la talla de nuestro Titular, el Stmo. Cristo de la Buena Muerte, del cual este año, se cumplen 35 años de su primera salida procesional.

Este año será un año dedicado de forma especial a nuestra Madre con motivo de este aniversario, culminando en los Cultos que se realizarán el 15 de septiembre en el Templo del Salvador, realizándose el tradicional besamanos. 

Igualmente, nuestro Cristo saldrá en el Vía Crucis, que se realizará esta Cuaresma, en la Iglesia de la Encarnación, portado a hombros por nuestros hermanos y toda persona que lo desee.

En la Junta de Gobierno posterior al Jueves Santo del año pasado, decidimos los diferentes proyectos a realizar, habiendo varios estrenos para este año.

Convencidos que debemos mejorar las condiciones de portado del trono y aligerar el peso, para hacer más liviano el trabajo de los horquilleros, se decidió la reforma integral del mismo.

En esta misma reunión, como conmemoración del XXV aniversario de María Stma. de la Amargura, se decidió la compra de diferentes rostrillos y enseres, así como la realización de una nueva corona para nuestra Madre.

Como cada año, nuestra cofradía ha seguido trabajando en su obra social, aumentando en la medida de lo posible el apoyo a Cáritas y diferentes asociaciones de nuestro pueblo. No podemos olvidar que la caridad no puede faltar en nuestra hermandad siendo uno de los fines de las cofradías.

Todo esto que os he comentado es el trabajo que se ha realizado durante el año, pero no me voy a despedir sin decir lo que creo verdaderamente importante de la Semana Santa y en lo que para mí, deberíamos vivir todos los cristianos y especialmente los cofrades.

Yo me siento cofrade, disfruto todos y cada uno de los días de esa semana, especialmente el Jueves Santo y muy especialmente el viernes por la mañana, en el “Paso”, tradición centenaria que se celebra en nuestro pueblo y nuestra cofradía tiene el honor de participar en ella, disfruto con la salida de nuestro paso y todo el recorrido.

Para mí es la celebración cristiana más importante, pero cada día estoy más convencido que no nos preparamos para esa celebración y no la vivimos comprendiendo lo que verdaderamente hizo Jesús por nosotros. Para poder vivir esa Semana Santa creo que debemos preparar y vivir de manera intensa la Cuaresma.

Cuaresma significa periodo de preparación, de reflexión que nos sirva para encontrarnos con nuestra fe, para que se olviden rencillas que pueda haber en nuestro corazón, apartando de él cualquier rencor, odio, envidia hacia cualquier hermano avanzando en el camino
de ser imagen de Cristo.

Todos sabemos que en los tiempos que vivimos no es fácil hacer todo esto, pero ¿fue fácil para Cristo?, por todo esto creo que es tiempo de ser valientes y comprometidos con nuestras creencias.

Debemos salir a la calle proclamando nuestra fe, mostrando al mundo que somos CRISTIANOS, sin ningún tipo de vergüenza y miedo, enseñando al mundo lo que mostramos en nuestra Semana Santa, El Amor de un Cristo que muere por salvarnos y la Alegría de un Cristo que ha RESUCITADO.

Que esta Semana Santa intentéis vivirla de la forma más intensa posible.”

 Hermano Mayor. Boletín XXX. Año 2019

Con la Fe ... a cuestas

Ya nos vamos acercando al día grande, las cofradías preparan su estación de penitencia, lo que la mayoría de los cofrades consideran el acto religioso o de culto más importante del año. Y es un hecho indudable la importancia que estas estaciones de penitencia tienen para la vida de los cristianos, para muchos de los cuales es la única forma de celebrar la Pascua de Jesucristo, ya que la participación en las celebraciones litúrgicas siempre es menor.

Por eso la Semana Santa hace a la iglesia más grande, cuando las cofradías sacan a sus Sagrados Titulares a la calle, éstas no son solo imágenes sin sentido, son testimonio cristiano de lo que sucedió en la vida, muerte y resurrección de Jesucristo. De ahí la importancia de tomar conciencia de que un cofrade es, ante todo, un cristiano que debe ser ejemplo de compromiso con la Palabra de Dios. Como hermanos y hermanas de una Cofradía no podemos ser, ni actuar como simples asociaciones públicas  de fieles de tipo cultural. Las imágenes salen para bendecir al pueblo y los cofrades deben ser, ante todos cristianos comprometidos, que lleven el mensaje de Jesucristo a los demás, no solo el día de la procesión sino durante todo el año. Y para ello es necesario alimentar nuestra fe, con la oración, la formación cristiana y los sacramentos.

Tenemos que ser fieles a lo que representamos, y confesar nuestra fe y dar gracias al Señor y a la Virgen, no solo sacando sus imágenes a la calle con devoción y respeto sino también siendo fieles al Evangelio y a la Iglesia de la que formamos parte y con la que colaboramos. Debemos hablar a nuestro corazón para no perder la esencia, para preguntarnos en cada momento como cofradía cual debe ser nuestra aportación cristiana a la vida dentro de la parroquia y en medio de la sociedad. Debemos dar más importancia a encontrar la luz y la fortaleza que a la mejor banda o a las más hermosas flores. Pensar siempre en lo que Dios quiere y demanda a cada uno de nosotros y a la cofradía.

No podemos obviar que las cofradías tienen también un elemento integrador en la sociedad, son muchas las familias, los amigos, que se implican y unen para sacar adelante sus pasos, y así, de camino mejorar su vida cristiana y sentirse acompañado en la fe.

La familia cofrade es muy importante en la iglesia y en la vida espiritual de nuestro pueblo, pero debería ser muy consciente de que todos forman parte de la comunidad parroquial, deben ser grupos abiertos a la parroquia, a la iglesia y a vivir su vida cristiana no como unos días de fiesta sino como un camino de crecimiento, formación y testimonio durante todo el año.

Y quiero compartir por último este escrito que me sirve de ayuda y preparación en estos días, sobre todo para no ser mera espectadora, sino también preparar mi alma para empaparme de nuevo en esta cuaresma del Espíritu Santo, para que me ayude a seguir en el camino con fuerza y esperanza.

Rezar

Rezar es departir con el Maestro,
es echarse a sus plantas en la yerba,
o entrar en la casita de Betania
para escuchar las charlas de su cena.

Rezar es informarle de un fracaso,
decirle que nos duele la cabeza;
rezar es invitarle a nuestra barca
mientras la red largamos a la pesca,
y mullirle una almohada sobre
un banquillo en popa, a nuestra vera.

Y, si acaso se duerme,
no aflojar el timón mientras Él duerma;
y es rezar despertarle, si, de pronto,
la mar se pone fea.

Es rezar – ¡que rezar!– decir «te quiero»,
y lo es – ¡no lo iba a ser! – decir «me pesa»,
y el «quiero ver» del ciego,
y el «¡límpiame!» angustioso de la lepra,
la lágrima sin verbo de la viuda,
y el «no hay vino» en Caná de Galilea.

Y es oración, con la cabeza gacha,
después de un desamor gemir «¡qué pena!»;
cualquier sincero suspirar del alma,
cualquier contarle a Dios nuestras tristezas,
cualquier poner en Él nuestra confianza…
–y esta vida está llena de «cualquieras»–,
todo tierno decir a nuestro Padre, todo es rezar…
¡Y hay gente que no reza!

  1. José L. Carreño, S.D.B.

 

Llevemos nuestras cruces, pequeñas o grandes, en los rosarios, en el cuello, en los tronos o a cuestas. Pero no olvidemos llevar nuestra fe, para que sea Dios quien nos guie en nuestra estación de penitencia.

 

Vocal de Cultos y Formación. Boletín XXXI. Año 2020

 

Saluda del Hermano Mayor. Cuaresma 2020

Un año más me dirijo a vosotros desde esta publicación anual que viene editándose desde hace 31 años. Este es el tercer año del nuevo formato, publicación ésta, cuya intención es que, en este tiempo de cuaresma, la cofradía establezca un dialogo directo con sus hermanos y dar a conocer los actos realizados por nuestra hermandad, durante el curso cofrade del año anterior. Sirvan estas publicaciones como instrumento que acerque la vida cofrade y cristiana al hermano, al visitante y al curioso; proporcionando información, documentación y fondo bibliográfico para las generaciones venideras.

 Quiero agradecer a todas y cada una de las personas que dedican su tiempo a escribir los diferentes artículos para la edición de esta revista, así como al redactor de la misma y a las empresas que desinteresadamente año tras año colaboran económicamente para que este boletín vea la luz.

Este pasado año ha sido un año intenso de trabajo: reforma de trono, nueva corona de Nuestra Madre María Santísima de la Amargura, realización del pregón y presentación de cartel anunciador del Jueves Santo, cultos a nuestros titulares, participación en procesión del Corpus Christi, procesión de nuestra patrona, Ntra. Sra. de la Antigua, participación en todos los actos realizados por la Agrupación de cofradías y charlas realizadas por nuestra Parroquia. Además de, venta lotería, Cruz de mayo, caseta de feria, Boletín anual “SAN JUAN”, recogidas de alimentos para Cáritas, apoyo a las diferentes asociaciones con las que colaboramos, noche solidaria de la caseta, campaña material escolar impulsada por nuestra Parroquia, etc.,

Dar mi agradecimiento a todas las personas que han colaborado; así como a los hermanos y hermanas integrados en los distintos grupos de la Parroquia y en especial a las que  componen la junta de gobierno, por  el esfuerzo realizado para llevar a cabo todo este trabajo, y animarlas a seguir trabajando con esfuerzo e ilusión para que esta Cuaresma en la que nos encontramos inmersos, nos una más aún como grupo y nos lleve a un Jueves Santo en el que nuestra cofradía luzca en su desfile procesional con nuestros sagrados titulares de una manera espléndida por las calles de Almuñécar.

Quiero animar a todos y cada uno de los hermanos de nuestra cofradía a que participen intensamente en nuestra hermandad. Nuestra cofradía siempre ha sido y será una cofradía abierta a todos los hermanos, antiguos, nuevos, mayores, jóvenes y niños; sea cual sea su punto de vista sobre cómo tiene que funcionar nuestra Hermandad. Todo desde el diálogo; desde el AMOR a nuestros titulares, pero desde el conocimiento de lo que representa y los valores que debe representar una cofradía de Semana Santa.

Como hermano mayor tengo el deber de escuchar cada punto de vista a cada persona que esté dispuesta a hacer crecer nuestra hermandad, y unir a todos los hermanos y hermanas entorno a nuestros Titulares.

Todo este trabajo que realiza nuestra hermandad, que puede verse en cualquier hermandad de nuestro pueblo, de Andalucía, o España, no tiene otro sentido que dar conocer que los cofrades no somos grupos de personas que se dedican a pasear obras de arte por las calles durante Semana Santa, si no que somos grupos de personas que trabajamos por nuestra sociedad apoyando en la medida de lo posible al más necesitado. Somos personas que creemos en lo que hacemos, y que cuando salimos en nuestro desfile procesional estamos haciendo un acto de Fe; pero no a nuestros titulares, un acto de fe en un Cristo Resucitado.

Quiero terminar con un fragmento del evangelio de San Juan: la escena de la crucifixión.

“Junto a la cruz de Jesús, estaba su madre, la hermana de su madre, María mujer de Cleofás, y María Magdalena.  Jesús, al ver a su madre y junto a ella al discípulo al que amaba, dijo a su madre: «Mujer, ahí tienes a tu hijo».  Luego dijo al discípulo: «Ahí tienes a tu madre». Y desde aquella hora, el discípulo la recibió como algo propio.” Jn 19:25,27.

Jesús confía su madre al discípulo a quien él amaba: «He ahí a tu madre». Con ello, presenta a María como madre de los discípulos que aman a Jesús.

Como discípulos que amamos a Jesús, el nos confió a su madre; que durante nuestra vida seamos imagen del Amor de esa madre y dignos de la confianza que Jesús depositó en Nosotros.

Que tengáis una buena Cuaresma y Semana Santa.

 

Hermano Mayor. Boletín XXXI. Año 2020

Carta del Jefe de Trono. Jueves Santo 2020

9  de Abril de 2020.

Hoy cuando se vaya acercando la hora, ese sentir tan raro que tenemos dentro de nuestros corazones ira a más.
Pasaremos un Jueves Santo diferente, estaremos unidos por nuestros sentimientos, pensamientos y corazones.
Todo esto que está pasando nos hará personas más fuertes.
Solo os quiero dar ánimos y pediros que hoy a las 7 de la tarde, todos a una en nuestros pensamientos y desde nuestros corazones, sentiremos el toque de campana:
¡¡Esta “levantá” va por todos los que nos dejaron debido a esta pandemia, por todos los que están luchando todos los días en primera línea, en los hospitales y por nuestros cuerpos de seguridad en nuestras calles. Y por todos los hermanos de la cofradía!!
¡¡Vamos todos a una, al toque de campana,  con más ganas que nunca!!
¡¡ Al cielo con ellos!!
¡¡ Viva el Cristo de la Buena Muerte!!
¡¡Viva Santa María de la Amargura y Viva san Juanico!!
Cuidaros y seguir cuidando de vuestras familias, nos vemos pronto.
Vuestro Jefe de Trono
Joaquín Contreras Pérez

descarga carta jefe de trono

Saluda del 2º Jefe de Trono. Cuaresma 2020

Este año me han asignado la responsabilidad de dedicaros unas palabras en nuestra revista, pero si me paro a pensar no es una responsabilidad escribir sobre los horquilleros de San Juan, sino todo lo contrario, no hay más orgullo que hablar de nuestra cofradía, de nuestros horquilleros y de lo que representamos cuando salimos a la calle cada Jueves Santo.

Se acercan esas fechas en las que el sentimiento cofrade empieza a correr dentro de nosotros, esa señal que nos viene cada año que nos dice que nos tenemos que ir preparando para nuestra Estación de Penitencia, para nuestro Jueves Santo, para pasear por las calles nuestra Fe, para sacar a nuestro Cristo de la Buena Muerte, a nuestra Virgen de la Amargura y a nuestro San Juan, porque creemos y sentimos nuestra Semana Santa y nuestra cofradía.

Son muchos recuerdos los que vienen a la mente, muchas anécdotas que resurgen cada año y que no nos cansamos de comentarlas, muchas personas que ya no están entre nosotros y que siempre recordamos con mucho cariño, porque gracias a ellos se ha mantenido viva nuestra idiosincrasia, porque, aunque no estén siguen formando parte de la cofradía, ocupando el mejor palco que hay en cielo y mientras se recuerden seguirán entre nosotros. Y nosotros tenemos la responsabilidad de mantener esos valores e inculcárselos a nuestros hijos, porque es un orgullo ver a día de hoy en el trono a padre e hijo portando a nuestros Titulares igual que hizo mi padre conmigo en su día y que hoy tengo el honor de ocupar el puesto que ocupaba él en la cola del trono. No hay mayor orgullo para un padre que su hijo siga sus pasos. Seguro que el mío estará orgulloso que toda su familia salga cada Jueves Santo. 

Nosotros cada Jueves Santo tenemos el orgullo de portar la Fe por la calles de Almuñécar, de llegar a esas personas que no pueden salir a la calle por alguna enfermedad, de provocar lágrimas en aquellas personas que nos esperan en cada calle para vernos pasar, clavando sus miradas en la cara de nuestro Cristo de la Buena Muerte, en nuestra Virgen de la Amargura y en nuestro San Juan, pidiéndole por un hijo, por sus seres queridos que lo están pasando mal y necesitan ayuda en ese momento. Pero esa fe aparte de hacerla llegar a cada persona en cada calle, la llevamos cada uno en nuestros corazones cada Jueves Santo, porque cada horquillero que sale cada año pide también por su familia, también llora y también puede que lo esté pasando mal. Por todas esas personas, las que ya no están entre nosotros, por las que esperan en cada calle y por nuestra cofradía merece la pena nuestro esfuerzo portando a nuestros Titulares y hay que seguir manteniendo y trasmitiendo dentro de la humildad, nuestro sentimiento y nuestra seriedad debajo del varal y ser el espejo en el que se mire cualquier horquillero de nuestro pueblo.

Que cada vez que mezáis a San Juan con cada marcha os sintáis orgullosos, que no hay mayor orgullo llevar a nuestros Titulares con el sentimiento que nosotros los llevamos y que en cada calle retumbe el ¡Viva San Juanico!

 

Segundo Jefe de Trono. Boletín XXXI. Año 2020

Del Jefe de Trono. 2019

Como pasa el tiempo… De nuevo me dirijo a todos vosotros, a los horqui lleros de San Juan, los que hacéis posible que esto sea una realidad año tras año demostrando la fe y la devoción que llevamos dentro. Me siento orgulloso de poder dirigirme a vosotros y sobre todo de poder guiaros un año más en nuestro día grande por el camino de la penitencia, se que sabéis de sobra el sentir que me mueve cada Semana Santa al lado vuestro.


Cuando estaba empezando este escrito para dirigirme a vosotros recuerdo con orgullo, como lo hicisteis el año pasado, la pasión que ponéis, me llena de sentimientos y ganas de estar ya en la calle mirando de frente a nuestro Cristo de la Buena Muerte a nuestra Virgen de la Amargura y a nuestro San Juan. Sí, me siento un privilegiado y os doy las gra
cias de corazón por todo lo que me dais cada uno de los horquilleros.

Nuestra función principal es la de acercar nuestras imágenes al pueblo con la elegancia que lo hacemos y de forma natural sin necesidad de alabanzas ni alardes de valentía, pero si, con el orgullo de ser horquilleros de San Juan.


Nuestra labor es muy importante para el mundo cristiano, la pasión y la devoción con la que vivimos la Semana Santa, en particular nuestro gran día el Jueves Santo, siempre en el anonimato, con el rostro cubierto en todo el recorrido demostrando el respeto por lo que hacemos y el respeto por lo que llevamos en nuestros hombros.


La Semana Santa es un momento que podemos utilizar para reflexionar, meditar y pensar sobre todo lo que hemos vivido durante todo el año y agradecerle a Dios y a nuestro San Juan por nosotros y por nuestra familia.


Al igual que en años anteriores seremos el reflejo de la fe por lo cristiano puesto en escena por nuestras calles de Almuñécar.


Hermanos, con el orgullo de ser horquilleros en nuestro pueblo, en nuestra Semana disfrutemos juntos un año más y que Dios nos de salud y fuerzas para seguir muchos más.


A nuestro Hermano Mayor te deseo lo mejor y que el Cristo de la Buena Muerte, la Virgen de la Amargura y San Juan te ayuden y te guíen en cada momento en tu nueva aventura para la que eres “ El Elegido “.


“Cuando la niebla de la incertidumbre trate de ocultarnos el mañana, la fe en Dios nos alumbra y nos señala el camino a seguir¡¡ VIVA SAN JUAN ¡¡ Y ¡¡VIVAN LOS HORQUILLEROS¡¡

Jefe de Trono. Boletín XXX. Año 2019

Amarás a Dios sobre todas las cosas

No me sorprendieron los datos que leí navegando por internet. En cuanto a la asistencia a misa u otros oficios religiosos –sin contar bodas, comuniones o bautizos–, un 1,7 por ciento de los que se declaran creyentes dice asistir varias veces a la semana; un 13,3 por ciento, casi todos los domingos y festivos; un 9,3 por ciento, alguna vez al mes y un 14,5 por ciento, varias veces al año.

Mientras, un 60,3 por ciento asegura no ir casi nunca. No me sorprendieron, porque yo sí que voy a misa todas las semanas y veo como quedan bastantes asientos libres. A veces hasta medio templo vacío. Y, teniendo en cuenta que Jesús nos pidió (“Haced esto en memoria mía”), a cambio de nuestra salvación (“Yo soy el pan vivo bajado del cielo; si alguno come de este pan, vivirá para siempre”), que asistiéramos y participáramos en la Eucaristía, lo que sí no deja de sorprenderme es la pasividad y tranquilidad de los que se declaran cristianos, pero que no van a misa. 

Estamos en los días propios para recordar porqué somos cristianos, seguidores de Jesucristo, hijo de Dios, que vino a salvarnos y murió y resucitó por nosotros. Días para recordar su pasión, su martirio y su triunfo sobre la muerte. Y para darnos cuenta que lo seguimos necesitando, por ello, se quedó a nuestro lado. No muerto, ni inerte en unas imágenes, sino vivo. Y necesitamos su Palabra, alimentar nuestra fe con su Cuerpo y su Sangre. Y reforzar nuestros espíritus juntos, como hermanos, en su casa, en su templo, que es el de todos.

Ante todo, recordar que está ahí. En el Sagrario. Presente en cada Eucaristía. Son días de visitar mucho los templos, que huelen a flores e incienso; ver las hermosas imágenes, los decorados tronos, los vistosos trajes, y las iglesias se llenan de gente, y Dios vivo está al lado y la mayoría ni lo mira, ni lo respeta. Un cristiano o cristiana no puede permitir eso,

“Amarás a Dios sobre todas las cosas”, dice el primer mandamiento y lo estamos olvidando.

A lo mejor deberíamos ir más a misa y aumentar el porcentaje.

Vocal de Cultos y Formación. Boletín XXX 2019

 

Vocalía de Juventud. 2020

Un año más, nos llenamos de fe e ilusión al tachar los días en el calenda rio y ver lo próximo que está nuestro día grande.

Como estrenado vocal de Juventud, me pongo a disposición de todos esos jóvenes que quieran unirse a nuestra gran familia, aportar ideas y colaborar en los distintos actos y eventos de nuestra cofradía.

Los jóvenes somos el futuro de la Semana Santa y es por ello por lo que debemos estar preparados para cuando llegue. Debemos curtirnos y aprovechar la oportunidad de acercarnos a esos no tan jóvenes que nos mostrarán el buen hacer y las pautas a seguir para seguir creciendo como cofradía en el futuro.

Os deseo una feliz cuaresma y una muy feliz Semana Santa a todos los hermanos y hermanas de la cofradía de San Juan.
¡VIVA SAN JUANICO!

Vocal de Juventud. Boletín XXX 2019

Vocalía de Juventud. 2019

Un año más, nos llenamos de fe e ilusión al tachar los días en el calenda rio y ver lo próximo que está nuestro día grande.

Como estrenado vocal de Juventud, me pongo a disposición de todos esos jóvenes que quieran unirse a nuestra gran familia, aportar ideas y colaborar en los distintos actos y eventos de nuestra cofradía.

Los jóvenes somos el futuro de la Semana Santa y es por ello por lo que debemos estar preparados para cuando llegue. Debemos curtirnos y aprovechar la oportunidad de acercarnos a esos no tan jóvenes que nos mostrarán el buen hacer y las pautas a seguir para seguir creciendo como cofradía en el futuro.

Os deseo una feliz cuaresma y una muy feliz Semana Santa a todos los hermanos y hermanas de la cofradía de San Juan.
¡VIVA SAN JUANICO!

Vocal de Juventud. Boletín XXX 2019